lunes, 6 de noviembre de 2006

Una historia preciosa, Free Hugs

De nuevo vía el blog de Camino del Exceso, en esta entrada, me entero de una noticia que había pasado por mis oídos varias veces pero nunca me había enterado a fondo de que iba el tema y la verdad es que me he emocionado al contemplarla. Seguro que os suena de algo Free Hugs (abrazos grátis), yo citaré textualmente la historia según se cuenta en Camino del exceso porque no podría contarlo mejor:

Juan Mann (seudónimo, viene a sonar como “One Man“, un hombre) sintió un gran momento de gloria después de un abrazo de una desconocida en una fiesta. Ese abrazo fue especial porque su vida se había vuelto bastante triste. “Sus mejores amigos están lejos, sus padres se han divorciado, ha roto con su prometida y su abuela está muy enferma.”

Después de esa experiencia, Juan Mann salió a la calle con un cartel para ofrecer abrazos gratis. Costó, pero a los quince minutos una abuela se le acercó y le dio el primer abrazo desinteresado. Poco después la gente se animó, hasta que Juan Mann tomó por costumbre todos los jueves salir a la calle para cumplir con dicha labor.

La bola se fue haciendo más grande, hasta que los periódicos se hicieron eco. Se hizo tan grande, que la policía decidió prohibir la exhibición de abrazos salvo pago de un seguro de 25 millones de dólares. Juan Mann no podía hacer frente a dicha suma y se puso a recoger firmas. Entregó nada más y nada menos que 10.000 firmas, suficientes para revocar la prohibición.

Uno de los “abrazados” fue un músico y cineasta llamado Shimon Moore, guitarrista y líder de los Sick Puppies, quien decidió hacer un documental sobre la vida de este peculiar personaje.

Más tarde, cuando la abuela de Juan Mann murió, Shimon Moore le dedicó este videoclip que montó con recortes de aquellas grabaciones y un genial tema de su banda, All the same.

Sencillamente, una historia preciosa.





Pero todo no ha quedado ahí. El fenómeno Free Hugs se ha extendido por ciudades de todo el mundo, entre ellas Madrid, aquí podéis ver otro precioso video de esta iniciativa en la ciudad.


2 comentarios:

David Ibáñez -Fox- Vamos a contarlo en Tiras. dijo...

Al fin y al cabo es cierto. Aún hay esperanza. La gente es capaz de hacer cosas maravillosas. Ver a desconocidos abrazándose hace que los ojos brillen de la emoción. Gracias, mustélido por hacerme sonreir.

barrilete dijo...

Tremendo documental de la humanidad. Algo tan supuestamente sencillo y gratificante...